-->

Seguidores

lunes, 28 de mayo de 2012

La ciudad perdida.

Un día, en unos de mis viajes por el mundo, llegué a una ciudad algo peculiar. Era una ciudad vacía pero que transmitía una gran tranquilidad y paz. Estuve sentada más de una hora en un banco bajo un árbol, escribiendo las memorias de aquel viaje que me había hechizado el corazón y me había repleto de intrigas en cada lugar donde me encontraba.
La última ciudad en la que estuve, fue la que más me enseño, una ciudad con encanto propio. Veréis, cuando llegué a aquella ciudad, todo parecía apagado y sin vida, pero al poco tiempo supe lo que realmente escondía entre sus calles.

No hay comentarios:

Publicar un comentario